Si alguien piensa que lo identitario en materia de comida es lo mismo que decir lo singular, lo original, probablemente cometerá errores garrafales buscando aquello que tiene (o tendría) Chile y que en ninguna otra parte del mundo existe (existiría). Como quién busca una esencia numinosa o un ADN encriptado a escala microscópica.
Si está a punto de cometer ese error, amigo lector, lea este buen post de uno que sabe.